Autor Jose María Vilella Guash, experto en dirección y asesoría de lavanderías industriales.
Los trabajos realizados por nuestra empresa por la geografía nacional, muestran de forma habitual las mermas en facturación que suponen el rectificar albaranes de entrega ante la disconformidad del cliente al revisar el material recibido.
Esta incidencia está instalada de forma permanente en la gran mayoría de lavanderías.
En algunos casos se corresponde a una realidad ocasionada por la falta de rigor en el control al efectuar expediciones y en otros casos, forma parte de la picaresca de algunos clientes que se han acostumbrado a reclamar para conseguir así una ventaja mensual en su coste de lavandería.
En ambos casos, la mejora del control en el sector de expediciones vendrá a resolver este inconveniente.
Estamos tratando un tema que, si no lo resolvemos, cuesta dinero y que en las auditorías realizadas hemos podido comprobar que, en algunos casos, está instalado con una representatividad mensual de hasta el 2% de la facturación.
Revisar el método de control que se está empleando para emitir el albarán de entrega, es conveniente.
El borrador de albarán, que resume el contenido de éste, debe ser considerado y tratado como documento contable.
En ocasiones es dificilísimo averiguar cuáles son los parciales que se están anotando para la posterior emisión del albarán.
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Referencias del autor:
Jose María Vilella Guash es experto en dirección y asesoría en lavandería industrial. Asesor de grandes empresas hoteleras que quieren mejorar sus resoluciones, aumentando su actividad total, capacitación de personal, auditoría de sistemas de producción, gestión periódica de lavanderías industriales, mejora de los sistemas de calidad, implementación de sistemas monitoreo y control de consumos/costos.
Colabora con ROMERAL LAVANDERÍA INDUSTRIAL, desde 2006, se le puede seguir también en: